Exhiben la obra de Oscar Niemeyer en Río de Janeiro

La primera exposición póstuma dedicada al arquitecto Oscar Niemeyer (1907-2012) llega a Río de Janeiro, en el Paço Imperial [Palacio Imperial], con más de 300 obras, distribuidas en ocho salas, ocupando una superficie de más de mil metros cuadrados.

La exposición, titulada Oscar Niemeyer: Clásicos e Inéditos permite al visitante hacer un viaje completo por la obra y la historia del mayor icono de la arquitectura moderna en Brasil. Entre los artículos en exhibición se encuentran desde plantas, bocetos y planchas enmarcadas a maquetas, fotografías, videos y proyectos inéditos que estaban en cuadernos hallados en los acervos de la Fundación Oscar Niemeyer y que fueron digitalizados por la institución, en colaboración con el Instituto Itaú Cultural.

"El propósito de esa muestra es revelar proyectos que, por muchas razones, se quedaron en el papel”, destacó el comisario de la exposición, Lauro Cavalcanti. Director del Paço Imperial y también arquitecto, Cavalcanti dice que la muestra permite comprender cómo Niemeyer concebía, dibujaba, escribía y seguía el desarrollo de sus proyectos. "Él registraba sus opciones visuales por escrito, en textos a los que llamaba "explicaciones necesarias". Si tuviera dificultad para alcanzar la claridad o la síntesis, volvía a la mesa de dibujo para rediseñar el proyecto", explica.

Entre los proyectos inéditos están las casas diseñadas para el escritor Oswald de Andrade y para el historiador Sérgio Buarque de Holanda, en São Paulo, y el plan de la ciudad de Neguev, en Israel, concebido por el arquitecto en 1964. "Neguev estuvo pensada para recorrerse a pie, con calles estrechas como en las ciudades medievales," dice Cavalcanti.

Las obras emblemáticas de Niemeyer, aquellas que el mundo entero conoce, también son recordadas en la exposición. Existen maquetas, por ejemplo, de la Iglesia de la Pampulha, de la Catedral de Brasilia y de la sede del Partido Comunista Francés, en París.

Una de las salas fue especialmente dedicada a los diseños de Niemeyer para la ciudad de Río de Janeiro, algunos de los cuales nunca ejecutados, como el del Estadio Olímpico Nacional, rechazado por el jurado de la competencia celebrada en 1941, que eligió otro proyecto, el cual se popularizó como el Maracaná.

Dos películas forman parte de la exposición: Oscar Niemeyer – O filho das estrelas (El hijo de las estrellas), de Henri Raillard, en el que el propio Niemeyer relata historias poco conocidas sobre su vida, y Oscar Niemeyer – A vida é um sopro (La vida es una ráfaga), en el cual imágenes de obras como el Palacio del Planalto y el Museo de Arte Contemporáneo, en Niterói, se ven alternadas con testimonios de personalidades como José Saramago, Eduardo Galeano, Ferreira Gullar y Chico Buarque.

Traducción: Lucas Magdiel